Rafael Espinosa / A los 11 años
de edad, César perdió ambos brazos a causa de una descarga eléctrica. La
curiosidad de mirar cómo armaban los juegos mecánicos de la Feria de la
Primavera y de La Paz, en San Cristóbal, fue el motivo para subirse a la azotea
del tercer piso de la casa de un familiar.
En un descuido, se desbalanceó y
para no caerse se sujetó de los cables de alta tensión, ocasionándole severas
quemaduras de tercer grado en ambas extremidades superiores. Fue tan fuerte la
descarga que lo aventó unos cinco metros sobre la misma azotea. Más tarde
dirían los doctores que tal decarga era capaz de quitarle la vida. Pero
atribuye que gracias a Dios, él cuenta con una segunda oportunidad de vida.
Sus familiares le comentan que
inmediatamente después del accidente se levantó, fingiendo que nada le había
ocurrido, incluso se puso molesto porque a la fuerza lo subieron a la
ambulancia. De esa parte no se acuerda, refiere.
El accidente ocurrió el 24 de
marzo del 2005; el 06 de abril, 13 días después, le amputaron los brazos tras
sufrir 27 cirugías y dos meses y medio de internamiento, en la Ciudad de
México.
Tenía los brazos y las manos
colgados, no podía moverlos a voluntad, estaban sin vida.
Para la familia, siendo hijo
único, fue un sufrimiento tremendo, sin embargo, César supo sortear las
dificultades emocionales. Hubo momentos escolares incómodos, pero así como hay
compañeros malos hay buenos, comenta.
Hoy, 17 años después del
accidente, sentado en una cafetería, frente al Parque de La Marimba, en Tuxtla
Gutiérrez, cuenta que es conferencista, toca la Marimba Podolaria, única en el
mundo, fabricada por su maestro, de San Cistóbal de las Casas, César Alexis
Díaz.
En el 2019, César del Valle
rindió tributo a José José, con el tema “El Triste”, en el programa “Venga La
Alegría”. En San Cristóbal, Chiapas, tuvo la dicha de tocar una canción, de
manera espontánea, con Arturo Aquino, “El Piano de México”, en el marco del
Festival Internacional Cervantino Barroco.
Participó en el Festival
Internacional de Marimbistas, en Villahermosa, Tabasco y Tuxtla Gutiérrez, así
como en eventos culturales en distintos municipios de Chiapas, y de manera
virtual hizo una presentación para el estado de Tamaulipas.
Además, concluyó la Licenciatura
en Derecho, la Maestría en Derecho Constitucional y Amparo. Actualmente trabaja
en el área de Derechos Humanos de la Secretaría de Seguridad y Protección
Ciudadana del Estado. Es también Premio Estatal de la Juventud 2014.
César Artemio del Valle Ruiz es
oriundo de San Cristóbal pero radica en Tuxtla Gutiérrez.
Conforme han pasado los años, ha
aprendido a valerse por si solo. Se ayuda de sus dientes para tomar un vaso,
los dedos de los pies para el teclado de la computadora, su boca para escribir
y usar el teléfono celular, con una habilidad impresionante, de tal manera que
en un mes aprendió a tocar la Marimba Podolaria, recuerda.
Hoy, ha decidido vivir de forma
independiente como parte de sus retos, aunque sus padres temerosos por tal
decisión, lo apoyan en este reto que para César significa dar un gran paso para
su crecimiento personal.
“Es hora de volar solo”, advierte.