Rafael
Espinosa
La
Procuraduría Agraria (PA), Delegación Chiapas, lanzó alertas
al Ayuntamiento capitalino para frenar toda venta irregular de tierra social o
ejidos fraccionados que se venden en pagos, pues como autoridad municipal y en
su plan de desarrollo urbano debe ser enfático y enérgico.
Arturo
Orta Rodríguez, delegado estatal de la
PA, dijo que se ven en calles y en algunos carros la leyenda:
"Vendo lotes de 10x20"; sin embargo, agregó, los interesados deben
preguntar a los vendedores, "enséñame tu escritura pública; dónde está
inscrita en el Registro Público de la Propiedad, a fin de que el adquiriente tenga la
plena seguridad de lo que compra".
La Ley
Agraria permite la
adopción del dominio pleno, dijo, pero también las autoridades municipales, en
coordinación con el Gobierno del Estado y el Gobierno Federal, a través de la Secretaría de
Desarrollado Social, deben regular este tipo de operación con la Ley de Asentamientos Humanos.
El
fenómeno se da en la capital del estado como en las 32 entidades federativas
del país, advirtió.
La Ley
Agraria permite la
constitución de inmobiliarias ejidales y se les ofrece este proyecto para que
-en forma ordenada y regulada- puedan los núcleos ejidales ofertar y participar
como empresarios.
Es
decir, hacerse empresarios inmobiliarios, es un procedimiento largo, sí, pero
es la forma más segura de que el ejidatario tenga certeza jurídica en la
operación de compra-venta, y el comprador tierra segura, sostuvo.
Mientras
tanto ahora son operaciones irregulares y son tierra social, enfatizó.
"(Los
compradores) No van a obtener una escritura, para eso está la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (Corett), que es la
encargada de regular los asentamientos", destacó.
La Corett, relacionada con la Secretaría de
Desarrollo Social y la
Comisión Nacional de Vivienda, está enfocada a mejorar las
condiciones de vida de las personas en situación de pobreza, mediante la
regularización de las tierras urbanas que habitan, de acuerdo a la página
virtual del www.conavi.gob.mx
Por
su parte, Jorge Manuel Rivas Peña, director de Catastro Urbano y Rural, en
Chiapas, subrayó que el Ayuntamiento capitalino debería actuar y meter orden
dentro de todo esto, aunque el problema ya lo sobrepasó, debido a tantas
colonias, tantos predios y además nadie evita esta práctica, es decir,
ejemplificó, tienes dos hectáreas, la haces pedacitos y nadie te va a decir
nada.
Rivas
Peña vaticinó que estos asentamientos irregulares traerán problemas gravísimos
a la ciudad, de desorden urbano, tráfico, servicios de poca calidad, pues hay
sitios inaccesibles y nunca les van a dar agua, porque de plano bombear un
litro de agua será totalmente incosteable.
Esto
se debe a la demanda, a la explosión demográfica, dado a que hay muchas
familias que quieren asegurar un patrimonio, y entonces ven en los ejidos
colindantes una oportunidad, dijo.
Aunque
como el problema es global, también tendría que ver la Procuraduría Agraria
y el Registro Agrario Nacional, a fin de que promovieran un programa y evitar
que los ejidatarios tuvieran esta facultad, aunque -reconoció- tampoco la Ley Agraria los cobija.
Nosotros
no los registramos, anticipó, salvo que ya lleven un proceso de regularización
con el Ayuntamiento.
Los
adquirientes tendrían problemas serios. Cuando preguntas por las escrituras,
los vendedores te dicen: "te lo voy a dar ya que termine de vender todo,
cosa que no es cierto, porque la
Ley de Ordenamiento Territorial y la Ley de Fraccionamientos son
muy claras", advirtió.
"Al
final del día, los compradores tendrán problemas jurídicos, porque ni van a
tener su escritura y ni un papel con el que puedan defenderse ante una
autoridad", puntualizó.